Odí sonos de aves, dulces e modulados / nunca udieron omnes órganos más temprados

Leyendo un poquitín para preparar esto, encontré esta pequeña maravilla de Los Milagros de Nuestra Señora de Gonzalo de Berceo: Yaziendo a la sombra perdí todos cuidados, odí sonos de aves, dulces e modulados; nunca udieron omnes órganos más temprados, nin que formar pudiessen sones más acordados. Unas tenién la quinta e las otras doblavan, otras tenién…